Un sistema portuario más eficiente no es solo un objetivo logístico, es una herramienta para el desarrollo económico y social del país.
En Guatemala, más de mil buques arriban cada año a Puerto Quetzal, el principal punto de ingreso y salida para el comercio marítimo. Sin embargo, muchos enfrentan largas esperas en altamar —algunos hasta 45 días— antes de poder atracar y descargar su carga. Esta situación representa más que una pérdida de eficiencia: es un reflejo de las oportunidades que el país aún tiene por aprovechar en infraestructura, planificación y gestión portuaria.
Según un análisis técnico de AGEXPORT, entre 2025 y 2027 Guatemala podría ahorrar entre $100 y $217 millones si se ejecutan mejoras estructurales en el sistema portuario,atracaderos, digitalización y el dragado se encuentran entre las acciones más prioritarias. No es solo un tema técnico: cada día que un buque permanece en espera genera costos que pueden superar los $45,000 al día , que eventualmente se trasladan a productos como alimentos, medicinas y materias primas.
A manera de ejemplo, entre abril y mayo de 2025 se estima que el país dejó de movilizar más de 250 mil toneladas métricas de productos por estas demoras. Las pérdidas en ese breve período podrían haber alcanzado hasta $14.5 millones. Esto afecta a exportadores, importadores y, en última instancia, a las familias guatemaltecas que asumen los costos invisibles de un sistema ineficiente.
Transformación portuaria
En medio de estos desafíos, también hay señales que marcan un nuevo rumbo. La reciente toma de control del Depósito Aduanero Temporal (DAT) por parte de Empresa Portuaria Quetzal (EPQ) —hasta hace poco bajo la operación de APM Terminals— representa un giro estratégico que ha venido a dar certidumbre al largo proceso legal de la terminal de contenedores. Si bien no es una solución definitiva, al menos es un paso en el entretanto se lanza la invitación a las empresas que podrán administrar esa terminal.
Un paso positivo es la coordinación con socios internacionales como Estados Unidos, a través de iniciativas de modernización, evidencia que nos encaminamos a soluciones de mediano plazo para impulsar un puerto más competitivo. No obstante, se requieren accionaes que podrían ayudar , como el dragado de canales y áreas de maniobra, que podrían ofrecer resultados visibles en el corto plazo.
Dragado urgente
Una de las acciones inmediatas para aliviar la congestión en los puertos del país es la implementación de dragados que permitan ampliar y mantener la profundidad de los canales de navegación. Estas intervenciones puntuales facilitarían el ingreso y salida de embarcaciones de mayor calado, reduciendo los tiempos de espera y mejorando la eficiencia logística.
De concretarse estos trabajos en el corto plazo, se estima que el país podría movilizar entre 2.1 y 4 millones de toneladas métricas adicionales en un periodo de tres años, fortaleciendo su capacidad de exportación y evitando pérdidas económicas derivadas de la saturación portuaria.
No es solo una decisión técnica
“Cuando los barcos llegan, descargan y se van sin demoras, el país gana en todos los frentes: el comercio se dinamiza, los precios bajan, y Guatemala se convierte en un socio confiable en las cadenas globales de suministro”, explicó Francisco Ralda, Presidente de la Junta Directiva de Agexport.
Hablar de dragados, grúas o contratos puede parecer ajeno al ciudadano común. Pero detrás de cada decisión técnica hay un impacto directo en la economía familiar, en la estabilidad de las empresas y en la capacidad del país de competir a nivel internacional. Por eso, más que una urgencia momentánea, es momento de asumir una conciencia logística nacional.
¡Modernizar los puertos no es solo mover más carga; es mover a Guatemala hacia adelante!