jueves, abril 18, 2024
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Alianzas Público-Privado – Modelo a Seguir para la Gestión Turística en Guatemala

Placa-Fanny-RamosLas  alianzas público-privadas en el turismo son modelos asociativos que promueven un destino turístico con una visión estratégica en común, permitiendo que tanto las autoridades locales responsables de los sitios como los emprendedores que administran hoteles, restaurantes y tour-operadoras, puedan formar parte del proceso de toma de decisiones posicionando el destino y aumentando su número de visitantes.

A nivel mundial este tipo de alianzas han surtido frutos importantes, tal es el caso de Andalucía en España, donde han apostado a la colaboración entre instituciones públicas y empresas privadas para impulsar el turismo en la comunidad. Posicionándose actualmente en el tercer destino de España para turistas extranjeros, siendo la duración media de la estadía, 10.8 días.

En Guatemala se inició hace varios años en el Parque Nacional Yaxha-Nakum-Naranjo, un proceso que demuestra el potencial y la posibilidad de éxito que tienen este tipo de alianzas. Actualmente este sitio turístico-arqueológico es catalogado como área protegida está ubicado en el departamento de Petén y recibe anualmente un promedio de 30,000 visitantes.

Este caso de estudio nos muestra cómo las autoridades gubernamentales, representadas por el Consejo Nacional de Áreas Protegidas y el Instituto de Antropología e Historia han logrado trabajar de forma conjunta con los empresarios comunitarios locales de la Asociación de Organizaciones para el Desarrollo del Territorio de Yaxha (ASODESTY) para definir el rumbo del destino, implementar las inversiones en materia de infraestructura, generar las capacidades requeridas para dar un servicio de calidad y más allá de eso hacer de la visita una experiencia inolvidable para el turista.

Si lo anterior no es suficiente para considerar este tipo de alianzas como una solución viable para la administración de sitios turísticos en Guatemala, el modelo en el Parque Yaxha  también asegura el resguardo de la vida silvestre, la protección de los remanentes de bosques y fuentes de agua, propiciando al mismo tiempo una derrama económica importante generando empleo y la especialización de la mano de obra a través del turismo.

Según información oficial del CONAP, existen alrededor de 328 áreas protegidas en Guatemala, muchas con alto potencial turístico que van desde parques nacionales, biotopos, refugios de vida silvestre hasta reservas naturales de carácter privado. El total de áreas protegidas asciende a 3.4 millones de hectáreas, que representan el 34% del territorio nacional, lo que nos hace ver el alcance de replicabilidad que tiene las alianzas público-privado en áreas protegidas y en muchos sitios turísticos en el país.

Experiencias como las del Parque Yaxha-Nakum-Naranjo demuestran que vale la pena explorar nuevas mecanismos de colaboración y coparticipación que nos permitan aprovechar de forma sostenible la riqueza que Guatemala posee y que al mismo tiempo pueda generar oportunidades económicas a sus comunidades locales.

Bibliografía

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